INFLUENCIA DE LA VITAMINA D EN LA FUNCIÓN CARDÍACA: UN ANÁLISIS DE SUS NIVELES ÓPTIMOS PARA LA SALUD CARDIOVASCULAR

Resumen

La investigación se propuso analizar la influencia de la vitamina D en la función cardíaca, con el objetivo de identificar la asociación entre los niveles óptimos de vitamina D y el riesgo de enfermedades cardiovasculares. El estudio aporta al creciente cuerpo de conocimientos en el campo de la cardiología y la endocrinología, destacando la importancia de considerar la vitamina D no solo como un nutriente esencial para la salud ósea, sino también como un factor potencialmente crucial en la prevención y el manejo de enfermedades cardiovasculares. La metodología empleada incluyó una revisión sistemática y un meta-análisis, en los cuales se seleccionaron 120 estudios (62.5% observacionales y 37.5% ensayos clínicos) para un análisis detallado. Se utilizó un modelo de efectos aleatorios para calcular el riesgo relativo y los intervalos de confianza del 95%, evaluando la heterogeneidad entre los estudios mediante la prueba Q de Cochran y el estadístico I². Además, se realizó un análisis de subgrupos basado en características como la edad, el género y la presencia de comorbilidades preexistentes. La calidad metodológica de los estudios incluidos se evaluó mediante la Escala de Jadad para ensayos clínicos y los criterios de Newcastle-Ottawa para estudios observacionales, siguiendo las pautas PRISMA para la presentación de revisiones sistemáticas y meta-análisis. Los resultados revelaron una relación inversa entre los niveles de vitamina D y el riesgo de enfermedades cardiovasculares, con una clara tendencia de disminución del riesgo a medida que aumentan los niveles de vitamina D. Se observó que los individuos con niveles superiores a 30 ng/mL de vitamina D presentaban un riesgo relativo reducido para el desarrollo de afecciones cardiacas. Además, se destacó la correlación inversa entre los niveles de vitamina D y marcadores inflamatorios, proporcionando una posible explicación de cómo la vitamina D podría ejercer un efecto protector sobre el corazón y los vasos sanguíneos. En conclusión, el estudio refuerza la hipótesis de una asociación significativa entre los niveles óptimos de vitamina D y una disminución en el riesgo de enfermedades cardiovasculares, subrayando la importancia de estrategias personalizadas en la suplementación de vitamina D, especialmente en grupos con mayor riesgo de deficiencia. Se resalta la necesidad de una mayor investigación para comprender completamente los mecanismos mediante los cuales la vitamina D influye en la función cardíaca y para establecer guías claras en torno a la suplementación óptima de vitamina D en el contexto de la salud cardiovascular.